martes, 30 de abril de 2013

Noche de Walpurgis

La madrugada del 1 de mayo se celebra el mayor aquelarre, más conocido como noche de Walpurgis (aunque otros lo conocen como Beltane). A algunos de vosotros puede que os suene por el Fausto de Goethe, donde aparece retratado lo que se creía que era esta fiesta: una noche donde brujas, vampiros, demonios, hombres lobo, trasgos, sátiros y todo bicho viviente se reunía con intenciones no muy buenas. Según el culto cristiano, una bacanal en honor al diablo.

Esta es la versión satánica de lo que fue la fiesta de las cosechas precristiana. Sigo diciendo que todas las fiestas y cultos que tenemos actualmente de herencia cristiana, realmente son mucho más antiguas, pero los cristianos fueron tan listos que en vez de abolirlos, los adaptaron a su culto y, así, cristianizar a la gente. Pero con esta fiesta, al igual como paso con el Carnaval, era complicada de adaptar al cristianismo.

Esta fiesta viene de un culto matriarcal, donde la gente celebraba por un lado la cosecha y la llegada de la primavera y despertar de la tierra. Como era un fiesta de la fertilidad, los cultos sexuales estaban a la orden del día. En esta noche, parejas se juntaban, realizaban matrimonios o, simplemente, hacían el amor celebrando la llegada de la primavera (si os fijáis  es en este periodo cuando mucho animales comienzan a aparearse). Una celebración un poco complicada de adaptar al puritanismo cristiano.

En cuanto al nombre, en el panteón teutón hay una diosa llamada Walpurga, diosa de las cosechas y de la fertilidad. En toda Europa, las vírgenes y santas actuales (al igual que los santos) fueron en la mayoría de los casos diosas paganas que se cristianizaron para poder propagar su culto (tal vez esta es una de las razones de su éxito), y con Walpurga no fue diferente. Así tenemos a la Santa Walpura, que se convirtió en abadesa de la orden benedictina de Heidenheim en el 754.


Aunque en España es una fiesta que se celebra más en los pueblos del norte peninsular, en el resto de Europa es más festejada. Tal vez hayáis visto en películas los "mayos", largos troncos colocados en vertical y con numerosas cintas con las que se bailan a la vez que se trenzan. Una fiesta que se celebra al aire libre, con bailes, juegos, música y muchas flores, siendo residuo de lo que fue la festividad precristiana.


En cuanto a su relación con las brujas, puede que la forma de celebrarlo antiguamente y otros ritos que acompañaban la festividad (como las hogueras por la noche o el cazador con máscara de ciervo, cuernos incluidos, que recuerda a las ilustraciones del diablo presente en los aquelarres) hayan hecho a los cristianos relacionarlo con lo pecaminoso y diabólico una celebración que, originariamente, celebraba la vida y la resurrección de la tierra. Sea lo que sea, para aquellas personas que celebren esta fiesta, decir que es una buena oportunidad para realizar hechizos de amor o adivinación.

¡Feliz noche de Walpurgis!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy interesante, gracias por la info.
Es una pena que los cristianos se hayan dedicado a pisotear malamente la cultura ancestral de otras culturas y le hayan dado una mal forma que en la mayoría de las veces ni sentido tiene.